Mi principal promesa es la ambición. Solo aspirando a lo más alto se llega a lo más alto. Si para encontrar trabajo no me basta con mandar una carta de presentación, mandaré 36 y si aún no lo encuentro, estoy dispuesto a llegar a las 365. Todas distintas, con su toque de singularidad, cada carta un experimento, una nueva meta de motivación. Cada carta será algo nuevo y, sin embargo, dirá lo mismo. ¿Magia? Redacción publicitaria, amigo.
Dominar esta disciplina es algo fundamental si su negocio se basa en engancharse en la mente del consumidor. No es suficiente con lo mono, lo cutre, lo cómico e incluso lo tramposo si no se le dice nada relevante. Un famoso publicitario de Madison Avenue afirmó que había que contar la verdad de forma que fuera fascinante. Y yo lo quiero llevar más allá. Pienso dar con 365 formas de contar mi verdad de forma sorprendente. Así pues, ¿qué podría hacer por usted?
¿Lo ve? Ya han pasado los tres párrafos que le decía y su cerebro ya va a 60 millas por hora pensando en lo que podemos hacer juntos y aún no me ha ofrecido mi puesto en su empresa. Estaré encantado de agradecerle su tiempo y de hablar esta cuestión en la entrevista, que puede concertar en el correo electrónico de la parte inferior de esta página.
*David Ogilvy (1911-1999) fundador de Ogilvy & Mather y uno de los publicitarios más influyentes del siglo XX, pionero del marketing directo y con una visión del trabajo y del negocio de lo más genuina y particular.
Bárbara Nicolau me propuso este estilo, aunque tengo que reconocer que siendo Ogilvy el primer autor que leí en la universidad y que habiendo trabajado en una agencia de la red Ogilvy & Mather, su imitación era una parada obligada.