Escribo para pedir trabajo, qué pretendo demostrar, que soy bueno… Si hay miles como yo ahí fuera. Qué más da otro Oscar, otro Arenas, otro Larios, si de todos tus conocidos de menos de 30 años, más de la mitad están en paro. Hayan estudiado lo que hayan estudiado. Eso suponiendo que en circunstancias normales sirva de algo estudiar, porque todo lo que yo aprendí lo aprendí en mi máster y trabajando después de licenciarme, no en la universidad… En realidad, sentarte en un aula es algo bastante improductivo, pasivo. Yo soy más de levantarme, de hablar yo, de demostrar todo lo que quiero hacer y hacerlo… El movimiento se demuestra andando y tu experiencia se demuestra con tu camino andado. No hay más. O lo tomas o lo dejas. Pero mientras te hablo, sigo andando. Mientras me muevo, soy cada vez un poquito menos pringado sin experiencia. Simplemente llámane, no hay más. He escrito esto del tirón y sin levantar las manos del teclado y no lo revisaré porque en eso consiste la escritura libre, en escribir «tal com raja» y sacarte las barreras de la mente en hablar de lo que sea. Por ejemplo de mi book y también de nuestro futuro en una agencia. Molaría, ¿eh?